Compañero opositor/a anímame porque:
- Lo necesito porque el miedo me está comiendo por dentro. Miedo a fallarme, a fallar a mis seres queridos y al fracaso, ese maldito sentimiento.
- Nadie más que tú, compañero, sabe lo que esto es. Ni mis padres, ni mis familiares, ni mis amigos ni mucho menos mi pareja. Solamente tú porque también estás pasando por esto.
- Seamos rivales, o no, somos personas y tus miedos son mis miedos, tus sueños son mis sueños y tus necesidades las mías. Nos necesitamos.
- Queda muy poco y cada día necesito más concentración, más fuerza y motivación, pero no la tengo, estoy cansado, muy cansado y te necesito.
- Lo único que escucho siempre es que las plazas ya están dadas, que son muy pocas, que son muchas o que simplemente es una pérdida de tiempo. No necesito escuchar esto porque no es justo.
Por favor, continúa tú.
Confía en ti. Confía en que una será tuya. Créetelo, porque así conseguirás que lo sea.
ResponderEliminarTranquilo, has puesto tu esfuerzo y tus conocimientos todo este tiempo, puedes ir tranquilo a la prueba porque dará sus frutos. Te lo mereces y vas a demostrarlo, no se trata de una ilusión infundada, son meses, años! de trabajo. Vas preparado, ahora a hacer el último esfuerzo hasta el examen. Venga!
ResponderEliminarTodo esfuerzo tiene su recompesa. Nunca es tarde y todo se puede conseguir con emoción y pasión. Podemos!
ResponderEliminarSuscribo por completo lo que dices. Me siento como tú: me invade el miedo a fracasar (a volver a fallar), a no conseguirlo. No estás solo. Somos muchos quienes creemos que merece la pena. Ahora, más que nunca, no hay que bajar la guardia. Quedan escasas cinco semanas. Debemos mantener el ritmo y la concentración. Si estás cansado de estudiar o no puedes concentrarte -porque hay jaleo en tu centro o en casa tu hijo quiere ver la tele-, aparca los apuntes y coge los ejercicios prácticos o la programación didáctica, que en mi caso la hago de Literatura Universal. Yo voy saltando de uno a otro. Hago lo que puedo...
ResponderEliminarPero, ¿sabes lo que me mantiene y lo que me impulsa a seguir luchando?: que si por alguna circunstancia no sale como deseo, no pueda echarme la culpa por no haber estudiado. Por mí no habrá quedado.
Ánimo y mucha suerte.